Sabemos que, aunque a veces son menospreciados, los clavos pueden ser un elemento fundamental para tu proyecto, y en INDASA queremos ser tu guía en esta elección crucial.
En esta travesía por el mundo de los clavos, exploraremos las tres C's esenciales: Conocer, Comprender y Criterios para elegir el correcto.
Primera “C”: Conoce los clavos
Desde sus humildes comienzos alrededor del año 3400 a.C. en Egipto hasta el presente, los clavos han sido valiosos en la construcción.
Aunque muchas personas lo dan por sentado, existe una diversidad de tipos de clavos diseñados para abordar necesidades específicas en la construcción.
Los tipos de clavos más usados, los cuales ofrecemos a nuestros clientes, son:
- Clavo alfilerillo: Clavo pequeño de acero pulido con punta diamante.
- Clavo estándar con o sin cabeza: Clavo común con acabado pulido.
- Clavo para concreto: Clavo de acero templado con cuerpo hexagonal recto y punta diamante. Su acabado puede ser negro o electrogalvanizado.
- Clavo paraguas: Clavo con cuerpo corrugado de acero galvanizado para una mejor sujeción. Posee cabeza con inserto de arandela en forma de paraguas para mejorar la protección del agujero contra filtraciones. También se destaca por una punta aguda.
- Clavo tomatero: Su principal característica es que posee un recubrimiento de cementado ecológico a base de agua que le ofrece mayor adherencia al entrar en contacto con la madera.
Cada uno de estos clavos ofrece un desempeño ideal basándose en sus propiedades físicas y químicas.
En INDASA, ofrecemos diversos tipos de clavos. Conócelos mejor y descubre sus características técnicas viendo este video:
Segunda “C”: Comprende sus aplicaciones
Ya que conoces mejor los clavos y sus tipos, es hora de que profundicemos en las aplicaciones específicas de cada clavo y cómo se destacan en proyectos concretos.
- Clavo alfilerillo: Este clavo es utilizado en una amplia variedad de aplicaciones que incluyen la fabricación de juguetes, fabricación y reparación de calzado, carpintería general y necesidades del hogar.
- Clavo estándar con o sin cabeza: Como su nombre lo indica este es el más común de todos. Por eso, puede ser utilizado en una serie de aplicaciones de albañilería, carpintería y hogar. Cuando la estética es importante, suele utilizarse sin cabeza para que no se note su presencia.
- Clavo para concreto: Gracias a su resistencia al impacto, este clavo es utilizado cuando se requieren elementos de sujeción simples capaces de penetrar concreto, block, ladrillo y otros materiales de alta dureza.
- Clavo paraguas: Al poseer una cabeza que protege mejor el agujero, este clavo es utilizado para instalar superficies expuestas a la intemperie como lo son los techos de lámina galvanizada.
- Clavo tomatero: Este tipo de clavo debe su nombre al hecho de que es muy usado en la fabricación de cajas de madera (huacales) para frutas y verduras. Sin embargo, también puede ser utilizado en otras aplicaciones de madera como la artesanía.
Al abordar una variedad de aplicaciones, los clavos de INDASA no solo aseguran una sujeción confiable, sino que también contribuyen al éxito y durabilidad de una amplia gama de proyectos constructivos y creativos.
Tercera “C”: Criterios para elegir el correcto
Seleccionar el clavo adecuado no es solo un arte, sino una necesidad para el éxito del proyecto.
Aquí te dejamos algunos consejos prácticos para ayudarte a tomar decisiones informadas.
- Entiende el proyecto y su alcance para determinar el material y la resistencia necesaria.
- Conoce los tipos de clavos disponibles para poder comparar sus propiedades y dar con el que mejor se adapte a tus necesidades. Esta guía te puede servir de ayuda.
- Evalúa la resistencia necesaria para determinar el calibre y el tamaño adecuado para soportar las cargas involucradas en tu proyecto. A mayor carga, mayor calibre y tamaño para garantizar la sujeción.
- Considera el material a sujetar. Si es madera puede que necesites el tomatero, pero si es concreto, la elección estaría más clara.
- Forma del clavo, especialmente para determinar el tipo de cabeza que necesitas o si necesitas un clavo sin cabeza.
- Revisar recomendaciones del fabricante para asegurar un uso y rendimiento óptimo.
- Prevé las condiciones ambientales para determinar si necesitas soluciones electrogalvanizadas para reducir la posibilidad de oxidación, por ejemplo.
- Consulta a los expertos en caso de dudas.
Siguiendo estos consejos, podrás elegir el clavo correcto para cada aplicación, garantizando no solo una sujeción segura, sino también el éxito y durabilidad de tu proyecto.
En INDASA, no solo ofrecemos una amplia gama de clavos de alta calidad, sino que también brindamos la confianza y experiencia que solo décadas en el sector pueden proporcionar. Con INDASA, la elección correcta es una garantía.
Contáctanos ahora, estamos para asistirte en cada paso de tu elección.